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Muñecos aterradores del cine
Annabelle, la última en llegar
La muñeca más terrorífica de «Expediente Warren: The conjuring» dio tanto miedo el pasado año que el director del filme decidió que merecía una película propia. Su historia, a diferencia de otros ingenios infantiles del cine, está basada en hechos reales: los que acaecieron a un matrimonio norteamericano que compró en los setenta una muñeca de la marca Rageedy Ann, muy popular en la época.
El juguete, como en la película, hacía movimientos sin que nadie la tocase y, según una medium, estaba poseída por una tal Annabelle Higgins. Su primera aparición cinematográfica tuvo lugar en la cinta de James Wan «Expediente Warren» y en casa de este matrimonio de investigadores descansa su versión real, encerrada en un armario de madera.
Chucky, el diabólico con saga
Si hay un muñeco famoso en cuanto a aterrar a niños y grandes, ese es Chucky, la creación de Tom Holland que, en 1988, desembarcó en los cines de todo el mundo. La historia del asesino Charles Lee Ray, que traspasa su alma (y sus instintos homicidas) a un muñeco con forma de niño y de nombre Good Guy («chico bueno») hizo mirar con otros ojos las estanterías de juguetes de los centros comerciales.
A partir de ahí, una lista de muertes, sangre y torturas adorna la carrera cinematográfica de este personaje que ya ha protagonizado seis películas (llega a tener novia, e incluso descendencia), la última de ellas estrenada el pasado año.
El payaso de Poltergeist
La inquietante figura de un payaso, iluminado solo por la luz de los rayos en la casa de «Poltergeist», es una de las imágenes que se ha quedado en la retina del espectador para siempre. Sin embargo, el juguete poseído por un espíritu ni siquiera tenía un papel protagonista en el filme y su único cometido era ejercer de distracción mientras el resto de espíritus intentaban abducir a Carol Anne.
Billy, el títere de «Saw»
Aunque no tiene nombre en la película, todo el mundo conoce al espeluznante títere de tez blanca con espirales en las mejillas como Billy, como le llamaba el equipo de la exitosa saga que creó James Wan. El muñeco es usado por el asesino Jigsaw para comunicarse con sus víctimas, aunque por su forma de maniobrar parece moverse por sí mismo. Tanto gustó que Billy aparece en las siete películas de «Saw»
El muñeco de la ventrílocua
James Wan (sí, otra vez) demostró su afición a los muñecos terroríficos con otro Billy para su película «Silencio desde el mal», basada en la historia de Mary Shaw, una ventrílocua que fue enterrada con sus 101 títeres, alguno de los cuales parece que todavía tiene movimiento...
Jack Frost, el muñeco de nieve asesino
Jack Frost es un asesino en serie (38 cadáveres le adornan) que, en una aciaga noche de invierno ve cómo una explosión accidental de ácido acaba con su vida. Sin embargo, se reencarna en un muñeco de nieve, que se dedicará a reeditar las fechorías de su otrora cuerpo de carne y hueso. La película de terror y comedia, de 1997, contó con una secuela en el año 2000, «La venganza del muñeco de nieve mutante asesino».
Tina, la muñeca habladora
Volviendo un momento a la pequeña pantalla nos encontramos con Talky Tina (Tina la habladora), protagonista de un episodio de «En los límites de la realidad» estrenado el día de todos los santos de 1963. La muñeca, que al principio dice la frase «mi nombre es Talky Tina y te quiero mucho» va modificando su discurso hasta llegar al «mi nombre es Talky Tina y podría llegar a odiarte», bajo la aterrada mirada de la familia que la acoge.
El títere de Anthony Hopkins
«Magic», un título dirigido por el recientemente fallecido Richard Attenborough, puso en escena a Anthony Hopkins por primera vez en el papel de un psicópata. Su personaje se cree poseido por la personalidad de Fats, el títere que le acompaña en su espectáculo.
Abigail, la parodia de Annabelle
También por la vía de la comedia llegó la versión humorística de Annabelle, Abigail, que aparece en «Paranormal movie 2». La muñeca es tan chistosa que incluso se hace selfies con los protagonistas de la película.
La muñeca más terrorífica de «Expediente Warren: The conjuring» dio tanto miedo el pasado año que el director del filme decidió que merecía una película propia. Su historia, a diferencia de otros ingenios infantiles del cine, está basada en hechos reales: los que acaecieron a un matrimonio norteamericano que compró en los setenta una muñeca de la marca Rageedy Ann, muy popular en la época.
El juguete, como en la película, hacía movimientos sin que nadie la tocase y, según una medium, estaba poseída por una tal Annabelle Higgins. Su primera aparición cinematográfica tuvo lugar en la cinta de James Wan «Expediente Warren» y en casa de este matrimonio de investigadores descansa su versión real, encerrada en un armario de madera.
Chucky, el diabólico con saga
Si hay un muñeco famoso en cuanto a aterrar a niños y grandes, ese es Chucky, la creación de Tom Holland que, en 1988, desembarcó en los cines de todo el mundo. La historia del asesino Charles Lee Ray, que traspasa su alma (y sus instintos homicidas) a un muñeco con forma de niño y de nombre Good Guy («chico bueno») hizo mirar con otros ojos las estanterías de juguetes de los centros comerciales.
A partir de ahí, una lista de muertes, sangre y torturas adorna la carrera cinematográfica de este personaje que ya ha protagonizado seis películas (llega a tener novia, e incluso descendencia), la última de ellas estrenada el pasado año.
El payaso de Poltergeist
La inquietante figura de un payaso, iluminado solo por la luz de los rayos en la casa de «Poltergeist», es una de las imágenes que se ha quedado en la retina del espectador para siempre. Sin embargo, el juguete poseído por un espíritu ni siquiera tenía un papel protagonista en el filme y su único cometido era ejercer de distracción mientras el resto de espíritus intentaban abducir a Carol Anne.
Billy, el títere de «Saw»
Aunque no tiene nombre en la película, todo el mundo conoce al espeluznante títere de tez blanca con espirales en las mejillas como Billy, como le llamaba el equipo de la exitosa saga que creó James Wan. El muñeco es usado por el asesino Jigsaw para comunicarse con sus víctimas, aunque por su forma de maniobrar parece moverse por sí mismo. Tanto gustó que Billy aparece en las siete películas de «Saw»
El muñeco de la ventrílocua
James Wan (sí, otra vez) demostró su afición a los muñecos terroríficos con otro Billy para su película «Silencio desde el mal», basada en la historia de Mary Shaw, una ventrílocua que fue enterrada con sus 101 títeres, alguno de los cuales parece que todavía tiene movimiento...
Jack Frost, el muñeco de nieve asesino
Jack Frost es un asesino en serie (38 cadáveres le adornan) que, en una aciaga noche de invierno ve cómo una explosión accidental de ácido acaba con su vida. Sin embargo, se reencarna en un muñeco de nieve, que se dedicará a reeditar las fechorías de su otrora cuerpo de carne y hueso. La película de terror y comedia, de 1997, contó con una secuela en el año 2000, «La venganza del muñeco de nieve mutante asesino».
Tina, la muñeca habladora
Volviendo un momento a la pequeña pantalla nos encontramos con Talky Tina (Tina la habladora), protagonista de un episodio de «En los límites de la realidad» estrenado el día de todos los santos de 1963. La muñeca, que al principio dice la frase «mi nombre es Talky Tina y te quiero mucho» va modificando su discurso hasta llegar al «mi nombre es Talky Tina y podría llegar a odiarte», bajo la aterrada mirada de la familia que la acoge.
El títere de Anthony Hopkins
«Magic», un título dirigido por el recientemente fallecido Richard Attenborough, puso en escena a Anthony Hopkins por primera vez en el papel de un psicópata. Su personaje se cree poseido por la personalidad de Fats, el títere que le acompaña en su espectáculo.
Abigail, la parodia de Annabelle
También por la vía de la comedia llegó la versión humorística de Annabelle, Abigail, que aparece en «Paranormal movie 2». La muñeca es tan chistosa que incluso se hace selfies con los protagonistas de la película.
